_¿porqué lo hiciste?

_lo hice siempre por tí

_quedaté conmigo, te invito a un café...te gusta el café?

_¿sabes algo de mí?

_no quiero volverte a ver...

_quedaté...me equivoqué...

_¿tú no lo sientes?

_no sé lo que me pasa.

_siento que me tiemblan las piernas...

_se estremece tú voz

_lo siento....no...

_ya no creo en nada...no creo en mi

_¿lo volverías a hacer?

_todas las veces que hiciera falta

_¿apostarías?

_apuesto que volvería a perder...

pero lo volvería a hacer.

_quedate conmigo...

_espero no volverte a ver...

_¿te encontraré en diciembre?

_quizá el frio te llame para estar cerca.

_sólo quiero saber que al cerrar los ojos en la cama un día. solo uno, pensaste en mí.

que al oír mi nombre en un momento sentíste el hormigueo..

_Espero que algún día abras la puerta al optimismo...

_para eso deja de tirar colillas en el suelo.piensa en mí.

cuando cuentas...

piensas...en tu reflejo...cuantos espejos te han mirado.

cuantos labios de desconocidos has besado.

Las miradas que ya no recuerdas, las personas que te han observado.

¿cuantos acordeones has escuchado?

¿cuantos sentimientos te han transmitido cuantos humanos, y tu nunca se los has contado?

siempre a desdén con el tempo...

carmín en los lavabos, noches de sábado, tu esperando, caminas, poniendote guapa.

cuantas veces no le has encontrado....

hoy estás parada ante el movimiento...

él de las calles oscuras de Madrid.

de nuevo sonando acordeones miras en tu reflejo,

los labios de carmín que esperan ser besados.

hoy de nuevo hay sentimientos que no has contado,

de a solas poniendote guapa,

intentando atrapar miradas para recordarlas.

Hoy no ha servido haberte encontrado.

Otra vez sentada frente a la mesa de apuestas.

de nuevo sola con la incertudumbre de lo que pueda pasar.

los dados sudorosos buscan oxigeno en el interior de mi apretado puño.

un instante, una decisión mal tomada, un movimiento en falso.

ya no puedo sentarme a esperar...

ya lo he dicho antes, no es mi baraja, ella es bastante buena y leal.

es mi mente que me juega malas pasadas,son mis escurridizas manos

que con miedo al fracaso tiemblan queriendo demostran que mis cartas son buenas

y entonces las enseño, en vez de jugarlas para ganar.

por eso siempre pierdo...